“El carnaval de Barranquilla es símbolo de alegría, por su diversidad y el fortalecimiento de nuestras raíces culturales”, dijo. “Las regiones necesitan tener sus propias voces en el gobierno nacional”. Rumbo a la candidatura presidencial del 2026: “Camino a la victoria”.
Por: Carlos Ramos Maldonado: Especial para EDSNoticias.com.co
La pregunta obligada en la Rueda de Prensa improvisada en el cruce de la calle 60 con carrera 44, en medio del desfile del Carnaval de la 44, la disparó de entrada el periodista Pacho Urruchurto: ¿Quién carajo es Caicedo?

Antes, vamos a explicar: carajo es una expresión mediterránea con dos acepciones, según su origen, aunque se controvierte por algunas diferencias contextuales y coloquiales: la primera proviene del latín carus, que significa bondadoso, y la segunda de la región andaluza que induce a sorpresa, impresión o intensidad. Por tanto, es, en sí mismo, un protoléxico cuyo uso semántico puede variar de acuerdo a la costumbre dialectal: ¡Del carajos, del putas!, o ¡Me importa un carajo!, o ¡Esto está del carajos!, o ¡Se porta del carajos!
Entonces, el dirigente político del Magdalena, territorio donde fue rector de universidad pública, alcalde de la capital y gobernador, además de fundar el movimiento político ahora nacional Fuerza Ciudadana, respondió a secas: “ …un costeño, como ustedes, un colombiano que ha trabajado por la gente más pobre…, que siempre ha estado del lado de los más vulnerables, los más humildes, y que propone construir un programa de políticas públicas con todos los sectores, con todas las regiones, que profundice los logros hasta ahora obtenidos por el gobierno Petro… y que transforme integralmente a Colombia”.

Las Élites que han saqueado la nación por muchos años, no pueden regresar al poder
Caicedo fue enfático en afirmar que por muchos años en su Departamento las élites que gobernaron se dedicaban al saqueo y a la corrupción, similares a otras élites de la misma calaña que existen en muchos lugares del país y que se han dedicado a enriquecerse en detrimento de la mayoría de la población.
“Con esos mismos recursos que antes los gobernantes se apropiaban, hemos logrado generar progreso, bienestar y oportunidades para la mayoría”.
¿Por la importancia de su experiencia positiva donde ha ocupado cargos públicos, se supone que no improvisaría en el Gobierno, si llega?
“Pues nosotros no vivimos en el Caribe circunstancialmente, sino que nuestra existencia misma está conectada con la Región. Por eso es muy importante el conocer los territorios, no solamente la geografía, sino la idiosincrasia, de este modo el conocimiento y la experiencia van de la mano. Sucede con en el ejemplo del enfermo y del médico: si usted tiene en su familia a un enfermo grave, no va a buscar a un médico cualquiera, sino que prefiere al más acreditado, con más record, con más registro de éxito en ese tipo de intervención, de allí que, en el caso que nos ocupa, la rama ejecutiva demanda de personas capacitadas y competentes en la ejecución, y eso no es un asunto que se improvisa; entonces, a mí sí me parece que, en perspectiva de lo que viene para nuestro país, es muy importante que más allá del espectáculo político y mediático, hay que examinar con mucho cuidado la experiencia de las personas para gobernar; claro que la experiencia en la rama legislativa es muy enriquecedora, pero es muy distinta a la de la rama ejecutiva, donde no se puede estar improvisando, pues se requiere mucho resultado”.

De la consulta presidencial en el 2018 con Petro al camino de la candidatura presidencial
Aunque Caicedo no confirmó su candidatura presidencial para el 2026, la dejó entrever, y recordó que en el 2018 estuvo en la consulta presidencial con Gustavo Petro representando la voz de las regiones, ocupando la segunda opción del abanico de candidatos, pero ahora se está evaluando si hay condiciones y capacidades para estar con un movimiento que se levanta desde los territorios periféricos que construya un proyecto de nación de abajo hacia arriba, inclusive, desde los valles interandinos, porque el excesivo centralismo, la concentración de poder en Bogotá, es uno de los factores que más ha incidido en el atraso de nuestro país.
“El centralismo ha estrangulado cualquier posibilidad de desarrollo. Cuando Colombia tuvo ordenamiento federal en el siglo XIX, la estructura fiscal del Estado fue más eficiente que la que hoy tenemos, ya que ahora las entidades territoriales de Colombia están sujetas al presidencialismo, donde todo se decide en Bogotá y casi nada se transfiere para la autonomía de las regiones, los departamentos y los municipios”.

Para lograr este nuevo proyecto de nación -continuó el dirigente político- se requiere la participación de la gente, en un proceso que, en concertación democrática, se defina cómo se transforma el país desde lo ambiental, lo institucional, lo social y lo productivo en clave de economía solidaria, la innovación y la agroindustria, con intervención de todos los sectores: los jóvenes, las mujeres, los sindicalistas, los maestros, los periodistas, los grupos étnicos, los campesinos, los comerciantes, los transportadores, los microempresarios y empresarios, porque el mandato debe surgir como una especie de imposición, de poder obendencial, por eso se está en la construcción participativa del proyecto que se ha denominado “un millón de ideas por la transformación de Colombia”.
Así que en este sentido se está convergiendo y concertando con los movimientos políticos y sociales progresistas y con la izquierda, partiendo desde las regiones, para revisar en conjunto el tema de la presidenciabilidad, y si, en el futuro, se tenga que hacer acuerdo con la centroizquierda y la derecha social en un frente amplio, pues se acuerda en conjunto para evitar que al país regrese la extrema derecha y el fascismo.

Carnaval en el bordillo, la gran rumba callejera
Para un costeño nacido en la tierra de nuestro nobel Gabo y criado en Santa Marta (uno de los nichos urbanos caribeños originarios del carnaval en Colombia) la rumba callejera no es extraña, y el bordillo en Barranquilla para ver uno de los desfiles en escenario público más largos del país es un espacio natural para el encuentro con la gente de bien, de clase media y popular, los amigos y amigas que coordinan su proyecto político en el Atlántico y Barranquilla, y los seguidores, más el apretón de manos de los hacedores del carnaval que lo distinguen cuando pasan y se acercan a saludarlo y tomarse la respectiva foto para el álbum digital de la versión 2025 del Rey Momo, porque aquí, en su reinado, se pasa del carajo y «quien lo vive es quien lo goza».
Carlos Caicedo aspira a continuar la labor administrativa del presidente Gustavo Petro, y desde ahora enfila baterías cargadas de cultura y folclor, entre otros aspectos, para recorrer el país y llevar el mensaje de transformación y cambio que ya comenzó y que debe continuar en la línea progresista.
